Los valores

Pensar dos veces antes de hablar y actuar

Un buen carpintero mide tres veces antes de cortar la madera. Una vez cortada, la madera no se puede alargar. Los animales se fijan de modo instintivo por donde avanzan. ¿Por qué algunos humanos, muchos, hablan antes de pensar o actúan antes de conocer bien el terreno?

A muchos adultos les falta un componente indispensable para poder vivir. Se comportan como niños. Los niños sólo entienden lo que ven, tocan, oyen, huelen, y gustan. Carecen de imaginación y perspectiva. No entienden la historia.

Hay que enseñar en concreto a actuar, explicando cada paso. Los niños inteligentes preguntan: ¿Por qué? No permitir que se acostumbren a no preguntar el por qué. Ni responder: Esto es así porque lo digo yo. Habituar a un niño a vivir sin respuestas es criar monstruos, que sólo harán lo que se les antoje en el momento.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *