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    Los pingüinos resistentes

    Había una vez unos pingüinos machos en la congelada Antártida que cuidaban a crías. Las pingüinas, sus hembras, buscaban alimento por el frio mar del sur. Un día se presentó a los pingüinos el ángel Gabriel y les dijo: Yo soy Gabriel, el que está delante de Dios. Tengo que decirles algo. Replicaron ellos: Qué te trae a estos lugares desolados con un clima bajo cero? Repuso el Ángel de Maria: Amados pingüinos. Jesús se enteró que hace mucho que no comen nada, echando de menos a sus esposas. Por qué ponen en peligro su salud? Se van a gastar y se dañaron sus hijos. El pingüino de más edad…

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    Los canguros locos

    Había una vez unos canguros, esos animales que llevan a sus hijitos en una bolsa que tienen delante de su cuerpo y se llama marsupio. Los canguros casi nunca llevan a sus hijos, sólo las canguras cargan con los hijos. Los canguros no caminan sino corren y escapan. En primavera los canguros machos se ponen loquitos y andan corriendo buscando cangura. Cuando encuentran alguna no la dejan tranquila por horas y horas. Se olvidan de comer y de dormir, y al fin se mueren. Un día el Arcángel Gabriel se presentó a los canguros machos y les dijo: Yo soy Gabriel, el que está delante de Dios. Tengo que decirles…

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    Los tiburones iracundos

    Había una vez unos tiburones toros que nadaban cerca de la playa. Incluso se Internan por los ríos de agua dulce que dan al Atlántico. Miden unos cuatro metros de largo y tienen unos dientes temibles. Son muy agresivos y atacan sin piedad a los humanos.Un día se presentó a ellos el Ángel Gabriel y les dijo: Soy Gabriel, el que está delante de Dios. Tengo que decirles algo.Los tiburones toros gritaron: ¿Acaso vienes a protestar?Repuso el Ángel de María: Si, estimados mamíferos. Me preocupa que ustedes sean tan llenos de ira. Para alimentarse no dudan en atacar a las personas que no se meten con ustedes. Y las destrozan.…

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    Las ardillas comilonas

    Había una vez unas ardillas amables. Son roedores pillos con un cuero marrón claro y panza blanca. La cola peluda es tan grande como el cuerpo: unos 20 cms. Hacen su casa en lo alto de los pinos, con dos salidas, para poder huir. No se unen a las demás, porque se pasan el día comiendo. Pican huevos de las aves, y tragan los gusanos que ven. Su alimento selecto son las nueces, avellanas, almendras, castañas, maníes, piñones y pistachos.Un día se presentó a ellas en Ángel Gabriel y les dijo: Yo soy Gabriel, el que está delante de Dios. Tengo que decirles algo.Las ardillas dijeron: ¿Eres el Ángel que…

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    La gallina anciana

    Había una vez unos pollitos que estudiaban en un local oscuro. Papá gallo era mandón y decía: No pierdan el tiempo jugando y saltando. Tienen que estudiar mucho para poder buscar alimento y defenderse.Un día se le presentó el Ángel de María y le dijo: Yo soy Gabriel, el que está delante de Dios. Tengo algo que decirte. Señor gallo: ¿Por qué obligas a tus hijos a estudiar tantas horas en el gallinero oscuro? ¿No sabes que la falta de luz les daña la vista? ¿Y quién te dijo que no se aprende cuando se juega?Replicó el gallo: No sabía esas cosas. Pero, ¿Si no estudian, de qué van a vivir?Cerca…

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    Los lobos consejeros

    Había una vez unos lobos que se habían reunido para tratar algunos asuntos. El jefe de la manada notó que no había venido un lobo que pertenecía al consejo lobuno. Porque los lobos tienen reuniones de consejo.Un día se presentó a ellos el ángel Gabriel y les dijo: Yo soy Gabriel, el que está delante de Dios. Debo decirles algo.Los lobos se miraron asombrados y preguntaron: Amado ángel, ¿Por qué nos visitas? ¿Acaso te han dicho los hombres que somos malos?Repuso el Ángel de María: Queridos, al contrario, vengo a felicitarlos sobre algo que la gente ignora: que ustedes son monógamos y viven pendientes de la familia.El lobo finísimo con…

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    La oración

    Llegaron a un jardín llamado Getsemaní, Jesús dijo a sus discípulos: Quédense aquí, mientras voy a orar. Luego llevó con Él a Pedro, Santiago y Juan, y comenzó a sentir temor y a angustiarse. Entonces les dijo: Mi alma siente una tristeza de muerte. Quédense aquí velando.Y avanzando un poco, se postró y oraba que en lo posible no tuviera que pasar por esa hora. Decía: Abba, todo lo puedes: aleja de mi este cáliz, pero no se haga mi voluntad, sino la tuya.Después volvió y encontró a sus discípulos dormidos. Jesús dijo a Pedro: Simón, ¿duermes? ¿No has podido quedarte despierto ni siquiera un hora? Permanezcan despiertos y oren…

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    La mujer muda

    Mi primer viaje en avión fue en 1962 a Salta. Allí era Obispo auxiliar, Carlos Ponce de León, y me había llamado para una misión entre campesinos. Cuando terminé, tuve algunos días para ir hacia el norte, a un pueblo donde había un colegio religioso. La superiora dijo: Mire Padre, tenemos una joven muda que trabaja en la cocina. Desde que la encontramos no ha dicho una sola palabra. Por favor, la voy a enviar para que haga algo por ella. Vino la muchacha. Es muy difícil decir la edad de los norteños, porque su piel, curtida por el sol nos engaña a los porteños. Dije: Soy de muy lejos…

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    Los gatos chismosos

    Había una vez unos gatos muy curiosos que apenas oían gritos de los vecinos corrían a mirar por la ventana, se quedaban en dos patas con tal de no perderse nada de lo que sucedía.Un día se presentó a ellos el ángel Gabriél y les dijo: Yo soy Gabriel, el que está delante de Dios. Tengo que decirles algo.Los gatos dijeron; Amado Ángel, ¿será serio lo que debes decirnos?Repuso el Ángel de María: Queridos felinos. Me llama la atención que ustedes parecen ariscos a todos. Sin embargo, al oír peleas entre vecinos, o de sus mismos patrones, salen de su sopor y rápidos prestan mucha atención a lo que sucede.…

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    El laberinto de Silo

    Había una vez un hombre llamado Silo. En su finca tenía un bosque denso con toda clase de arboles, plantas y yerbas. hizo un laberinto en el bosque. eso es un camino que da vueltas hasta poder acertar con el paso. Era un senda especial: no tenía señales ni carteles. Quien osaba entrar podía meterse por callejones sin salida y pasar horas hasta lograr irse. Además, el bosque estaba lleno de víboras que mordían e inyectaban veneno que mataba al incauto.el Ángel Gabriel se presentó a las víboras y les dijo: Yo soy Gabriel, el que está delante de Dios y vengo a preguntarles algo. Contestaron: ¿Qué deseas? el Ángel dijo:…