Sobre el ayuno
Algunas personas dicen que si ayunan se van a desmayar… En realidad, quizás nadie les explicó que el ayuno es de comidas preparadas y exige tomar mucho líquido, agua mucha, caldos de verduras coladas, caldos de hueso, jugos. Por lo menos, unos 4 litros por día de ayuno. El ayuno consiste en el que cuerpo se alimenta con lo sobrantes que posee de lo que ha comido y no se ha absorbido o se ha convertido en grasa. Lean lo que dice uno de los textos más antiguos de los Santos Padres:
El Pastor de Hermas (Siglo II)
El ayuno que vas a practicar tienes que observarlo de la siguiente forma:
Ante todo debes cuidarte de toda mala palabra y de todo mal deseo, y debes purificar tu corazón de todas las vanidades de este mundo. Si observas esto, tu ayuno será perfecto.
Harás el ayuno de esta forma: Una vez que hayas cumplido todo lo que está escrito, el día del ayuno no tomarás más que pan y agua. Calcularás el precio de las comidas que deberías haber tomado ese día, y entregarás esa cantidad a una viuda, o a un huérfano, o a un necesitado, y así te humillarás para que el que recibe el fruto de tu humillación se sacie y ruegue al Señor por ti.
Si cumples el ayuno como te lo he mandado, tu sacrificio será acepto ante Dios y este ayuno quedará escrito. Esta liturgia es hermosa, alegre y aceptable ante el Señor.
Observarás estas cosas de esta forma junto con tus hijos y con toda tu familia. Serás dichoso si lo cumples. Y los que lo cumplan así por haberlo escuchado, también serán dichosos, y Dios les concederá todo lo que pidan.
(Comparación quinta, 3, 6-9)
Pueden hacer ayunos de menos horas, por ejemplo tomar varios vasos de agua a la mañana y recién comer el almuerzo. O bien no comer nada desde un almuerzo temprano hasta la cena. Ahora lo que dice El Pastor es cierto: el ayuno se convierte en limosna. Acepta los vasos pequeños de alcancías para poner lo que no has comido. Normalmente el ayuno se hace los viernes, no sólo en Cuaresma. Además de purificar el espíritu, el ayuna purifica el cuerpo.