¿Sabías como se cura la depresión?
La depresión no tiene causas físicas, sino morales. Es el efecto dañoso de la sociedad de consumo, cuando la gente tiene un solo tema de conversación: el dinero y como gastarlo o guardarlo. Es la nueva idolatría del S. XXI. Ya no se adoran ídolos de barro, ahora se adora al Dios del dinero. No entraste sólo a esa sociedad. Te metieron a la fuerza y te quitaron la libertad. Tú único interés es ganar bien y disfrutar de tu plata. Que nadie venga a decirte que estás equivocado/a.
Tienes excusas para esa actitud: tengo que mandar a mis hijos a buenas escuelas, tengo que comprarles buenos útiles y libros, tengo que llevarlos de vacaciones para que reciban iodo cerca del mar, tengo que descansar porque esta ciudad me enferma, tengo que ayudar a mi madre anciana, etc. Y te dedicas a comprar la mejor ropa, la mejor comida o ahorras para comprarte un auto. Vas a los supermercados y llenas los carritos con toda clase de cosas, que después terminan en la basura. Entraste en la sociedad de consumo.
Para curarte de la depresión o curar a tus hijos, marido, esposa debes irte de los lugares de consumo a alguna parte donde no se pueda comprar nada. Porque el consumo enferma de depresión. Vete al pleno campo, a comer sencillo, a trabajar la tierra, a dormir sin pastillas, a rezar, a pensar, a dejarte conmover por la naturaleza, a escuchar la música de los ríos y los árboles. Y no te olvides de tomar abundante agua. La depresión se cura con agua.