Necesitamos salir de la ceguera
ÍNDICE
¿Cómo se hace?
La ceguera es peor que la pobreza
La ceguera en todas las tradiciones espirituales es la incapacidad de darse cuenta, de entender y de integrar lo espiritual en lo material. Esta ceguera es peor que la pobreza. Por eso, como no vemos bien nos convertimos en mendigos: mendigos de la novia altanera, mendigos de los hijos confundidos, mendigo de los amigos que te abandonan. Entonces buscamos a alguien que tenga el don de ver para que nos ayude. No vemos la Muerte y Resurrección de Jesús: por eso nos sentamos al borde de la ruta para pedir que nos saquen de una postura fija y nos lleven a seguir a Jesús.
Hay que sentir el arrepentimiento de nuestras culpas
A algunos les da vergüenza pedir. Por eso, el canto que pide piedad no lo cantan y les molesta que otros lo canten a toda voz. Sin embargo, es preciso tener un deseo fuerte de recibir el perdón para terminar con la ceguera. El caso más ridículo es el de los inmorales y criminales que señalan con el dedo a los que pecan. Su ceguera es permanente.
Caminamos con Jesús hacia la Cruz y el premio
Jesús escucha el clamor de quien tiene Fe y detiene su marcha. Si, a Jesús lo detiene quien pide de corazón para salir de la ceguera. Entonces, los que nos impedían ver a Jesús porque éramos ciegos y mendigos, cuando Jesús se detiene nos consideran importantes y dignos de apoyo. Los mendigos nos volvemos importantes cuando gritamos con Fe. Cuando Jesús nos dice: ¿Qué quieres que haga yo por tí?, al mismo tiempo nos levanta y nos ilumina. Pero no lo hace para que admiremos su poder, sino para que la Fe fuerte nos abra los ojos. Ahora podemos seguir el camino con Jesús hacia la Cruz y el triunfo.