Mayor responsabilidad para el bien común
Reflexiones frente a las próximas elecciones
“Se va acelerando el tiempo de las elecciones” y las elecciones “son como el festival de la casta política, porque para ellos es importantísimo, no porque piensen cuál es el servicio que nos van a brindar, sino porque hay que conseguir un lugar en las listas”.
Podemos conocer quizás a uno, dos o tres pero a la mayoría no los conocemos y tenemos que votarlos. A mí me parece que aquí hay una falla, hay algo que no funciona y nos hemos acostumbrado, los políticos nos han acostumbrado, a este sistema donde votamos cada dos años y para ellos lo importante es conseguir un lugar en las listas, pero las cosas no mejoran en el país sino que, al contrario, van empeorando.
La participación “tendría que ser también mucho más clara. La función política es algo muy noble y para un cristiano es algo que tiene que ver con la dimensión cristiana de la vida y con la santidad. Y los políticos
tendrían que enterarse de esto”.
“Estamos en un país laico, dicen, pero en realidad estamos en un país ateo, y el gobierno está aplicando cosas que son típicas del ateísmo, donde parece que la religión no tiene nada que ver con la vida social. El Concilio Vaticano II decía algo muy distinto, pues explicaba que ante cada situación el cristiano tiene un papel y que la vida social no puede prescindir de la dimensión religiosa. Hay, sin duda, una fuerte raigambre religiosa en el pueblo argentino pero eso es taponado por la política”.
Y concluyo proponiendo pensar: “qué podemos hacer para que esto cambie, como les dije, haciendo u omitiendo, porque no podemos dejar que la cosa siga así”.